Luego de una extensa reunión en Olivos, el Presidente Alberto Fernandez comunicó en conferencia de prensa que las clases se suspenden hasta el 31 de marzo, con el objetivo de «Tener un crecimiento paulatino del problema, pero de tal modo que el servicio sanitario argentino pueda controlarlo”, manifestó el Presidente.
Así mismo destacó que los establecimientos educativos permanecerán abiertos, ya que algunos cuentan con comedores, cumpliendo con otras funciones además de la educación formal.
En otro orden estableció el cierre de las fronteras para que no ingresen más que los argentinos o residentes y evitar así la proliferación de la pandemia.
En cuanto a las personas que trabajan y tienen más de 65 años, tienen a partir de ahora una licencia especial. Así mismo, se determinarán horarios para que la gente mayor pueda concurrir a entidades bancarias y centros de salud y así evitar estar en contacto con gran cantidad de personas.
La Universidad Nacional de La Plata también decidió el cese de actividades hasta fin de mes.