La simpleza de un plato en nuestra mesa, es el resultado del trabajo denodado de aquellos que cultivan esta tierra. Es la sabiduría, la dedicación… Es la cultura de esas manos que acarician el suelo. Es el sol y las lluvias, Son las sequías. Las cosechas y el volver a empezar.
Para esa gente de manos ajadas y rostro curtido por el sol, va nuestro reconocimiento.